La acelerada urbanización global evidencia la demanda creciente de vivienda asequible, sostenible y de rápida ejecución, especialmente en entornos donde el crecimiento demográfico y la presión sobre los recursos son intensos. De acuerdo con el Better Life Index de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), las familias gastan en promedio el 20% de su ingreso bruto en mantener su vivienda; no obstante, casi una de cuatro personas vive en un hogar con hacinamiento o con carencias habitacionales.
En respuesta a esta situación, la Alianza Global para Edificios y Construcción (GlobalABC) se estableció como la plataforma global líder que integra a gobiernos, empresas como Saint-Gobain, sociedad civil, instituciones de investigación y organizaciones intergubernamentales comprometidas con una visión común: una sociedad cero emisiones, eficiente y resiliente.
Desde entonces, la industria de la construcción ha diversificado sus soluciones más allá de los métodos tradicionales, explorando nuevas formas de edificación que permitan un mejor desarrollo. Es esencial una movilización rápida y global del sector hacia la construcción sostenible. Esta movilización debe tener como objetivo reducir de forma drástica y sostenible las emisiones de gases de efecto invernadero, vinculadas a la construcción; preservar los recursos naturales no renovables, reducir el consumo de energía, y ofrecer a todos una vivienda cómoda y digna.
En este escenario, la construcción ligera es una solución pragmática y eficiente, capaz de redefinir la manera en que se conciben los desarrollos urbanos y de ofrecer una opción viable para millones de personas que buscan un hogar asequible.
La construcción ligera se caracteriza por el uso de materiales avanzados y técnicas innovadoras que reducen significativamente el tiempo de ejecución de proyectos y los costos asociados. Este enfoque permite levantar estructuras de calidad en menos tiempo, una ventaja crucial en las zonas urbanas donde la demanda de viviendas es urgente y representando un alivio para los sectores de la población más afectados por la falta de oferta en el mercado. Las tecnologías detrás de la construcción ligera, que incluyen paneles prefabricados, materiales compuestos de alto rendimiento y sistemas de montaje rápido, han demostrado que es posible ofrecer soluciones alternativas a la construcción tradicional sin sacrificar la calidad, un paso clave hacia una urbanización más inclusiva.
Además de ser una respuesta accesible y viable a la falta de vivienda, la construcción ligera también contribuye de forma positiva al medio ambiente. La reducción en el uso de recursos naturales, la menor generación de residuos y la posibilidad de incorporar materiales reciclados y renovables en el proceso son aspectos que hacen de este enfoque un aliado para enfrentar los retos del cambio climático. Según el Rastreador Climático de la Alianza Global para los Edificios y la Construcción (GlobalABC), para que el sector de los edificios se encamine hacia la neutralidad de emisiones para 2050, todos los actores de la cadena de valor deben aumentar hasta cinco veces las acciones de descarbonización y su impacto.
El potencial de la construcción ligera no se limita a la velocidad de ejecución o la eficiencia de recursos, sino a la capacidad de ofrecer espacios que velen por la salud y el confort de los usuarios, respetando el entorno construido. De acuerdo con el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la GlobalABC, en el pasado, por cada dólar gastado en procesos de eficiencia para edificios, se gastaban 37 dólares en técnicas de construcción convencionales. Las soluciones basadas en este tipo de construcción han demostrado ser especialmente eficaces en proyectos de vivienda social y desarrollos a gran escala, donde la rapidez y la asequibilidad son prioridades.
Más allá de las ventajas económicas y ecológicas, la construcción ligera impulsa una visión que prioriza la resiliencia y la adaptabilidad, lo cual permite a las ciudades planificar, creando espacios que pueden ser fácilmente ampliados o modificados según las necesidades de la población. La capacidad de adaptarse al entorno y a las demandas sociales hace que este enfoque no solo sea una herramienta útil, sino una parte esencial de un futuro urbanístico más justo y sostenible.
Frente a la crisis de vivienda que afecta a ciudades en todo el mundo, es imperativo que las soluciones sean no solo rápidas y respetuosas con el medio ambiente, sino también económicamente viables. La construcción ligera, con su combinación de tecnología, eficiencia y enfoque en la asequibilidad, se posiciona como una respuesta integral. Mientras las ciudades continúan creciendo, las prácticas de construcción deben evolucionar para ofrecer espacios habitables, asequibles y sostenibles, donde la calidad de vida y la responsabilidad ambiental se encuentren en perfecta armonía.
Acerca de Saint-Gobain
Líder mundial en construcción ligera y sostenible, Saint-Gobain diseña, fabrica y distribuye materiales y servicios para los mercados de la construcción y la industria. Ofrece soluciones integradas para la renovación de edificios públicos y privados, la construcción ligera y la descarbonización de la construcción y la industria desarrolladas a través de un proceso de innovación continua, aportando sostenibilidad y rendimiento. El compromiso del Grupo está guiado por su propósito, “MAKING THE WORLD A BETTER HOME”.
€47.9 billones en ventas en 2023
160,000 empleados, presencia en 78 países
Comprometidos a lograr cero emisiones netas de carbono para 2050
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Fuente:
- Boletín cortesía de Saint-Gobain