Fondo de Cultura Económica

El edificio:

Fondo de Cultura Económica, cuenta con un diseño moderno, obra de Teodoro González de León. En su construcción se emplearon materiales como concreto, acero y vidrio.

Datos:

• Propietario: Fondo de Cultura Económico
• Arquitecto: Teodoro González de León
• Año: 1990 – 1992
• Colaborador: Ernesto Betancourt
• Diseño de interiores: Luis A. de Regil
• Diseño estructural: Héctor Margain Ancira
• Diseño de aire acondicionado: Calefacción y Ventilación, S.A.
• Diseño eléctrico: COESA Ingeniería S.A.
• Diseño hidráulico y sanitario: GHA y Asociados
• Área de construcción: 8,400 m2

En 1992, Teodoro González de León, logró completar un complejo de edificios que en realidad había comenzado 20 años antes. Este proyecto para el Fondo de Cultura Económica, está diseñado básicamente a partir de tres bloques autónomos que sirven propósitos específicos separados. En 1995, González también construyó el puente de conexión localizado en la parte frontal del edificio principal.

Cabe señalar de inmediato que González, decidió diseñar una estructura metálica de base triangular en la parte superior del edificio para inyectar una sensación de ligereza en el imponente diseño general del edificio.

La escalera central construida alrededor de un diseño circular evoca claramente el diseño de Bramante para el escalón en los Jardines del Vaticano en Roma. Sin embargo, la característica clave de este proyecto es su decidido intento de dar a la fachada principal una imagen plástica y flexible a la vista de los espectadores. Lo extraño es que el diseñador ha optado por ocultar esta característica clave dentro de una forma escultórica curva diseñada, como de costumbre, con gran maestría. Casi parece que este imponente edificio está tratando de despegar y volar. sus formas plásticas son ligeras, monumentales, poderosas y muy inventivas. Toda la construcción crea una gran sensación de elegancia arquitectónica a medida que las formas cóncavas y convexas se unen tanto en la plaza frontal como en la elevación general del edificio.

Una última característica importante de este proyecto es el gran respeto que muestra González por la naturaleza. El área en la parte trasera del edificio contiene un depósito natural de rocas volcánicas, que el diseño abarca cuidadosamente como si quisiera agarrarlas y realmente abrazarlas.
González ha puesto en práctica sus creencias sobre la interacción entre la forma y la naturaleza, consciente de que este es uno de los temas más importantes en el debate contemporáneo sobre el diseño de la arquitectura. (texto tomado y adaptado de González de León, Architecture as Art).

Fuente:

1. Redacción: Edificios de México.
2. Fotografía: edemx
3. González de León Teodoro,  1a ed., 1998, González de León, Architecture as Art., l’Arca Edizioni., pp. 44 – 55.